La lucha interior

Un anciano cheroqui contaba a sus nietos la lucha que se desarrollaba dentro de sí mismo:

!Una gran pelea está ocurriendo en mi interior¡ Es entre dos lobos. Uno de los lobos es diabólico; es maldad, temor, ira ,envidia, avaricia, culpa, resentimiento, inferioridad, mentira,… El otro es bondadoso; es alegría, paz, amor, esperanza, serenidad, humildad, coraje, perseverancia, empatía,….Esta misma pelea está ocurriendo entre vosotros y dentro de todos los seres de la tierra.

Los nietos pensaron unos instantes y uno de ellos preguntó a su abuelo: ¿Y cuál de los lobos crees que ganará?

El sabio anciano simplemente respondió: el que más alimentes.

Este artículo va dedicado a los que se preocupan por su su relación con la comida, se estresan, se obsesionan y sufren. Algunos sufren una la lucha interior con la comida, aunque esta lucha se puede extrapolar a otros ámbitos, ya que es así como funciona la mente.

¿Cómo podemos alimentar esa parte de nosotros que nos hace sentir mejor en relación con la comida? Aquí os propongo alguna ideas.

Háblate bien

En general, nuestra relación con el entorno y con nosotros mismos viene condicionada por lo que nos decimos sobre ello. Una manera de alimentar “al lobo bueno” es observar lo que nos decimos; cuidar cada una de las palabras con las que nos hablamos a nosotros mismos. Muchas veces en la consulta escucho expresiones como “debería”, “soy un desastre”, “no soy disciplinada”, “no tengo voluntad”, “me siento culpable”, “soy un caos”. ¿A qué lobo os parece que alimentan todas estas palabras? Estas palabras dichas una y otra vez sin parar (la mente se comporta como un disco rallado) terminan generando un sentimiento de desesperanza, ansiedad, tristeza, impotencia y malestar. Cualquier trabajo que hagamos desde aquí está destinado al fracaso.

Mi propuesta esta semana es muy simple: empieza a tratarte bien, ayuda a tu mente a focalizarse en lo que te gusta y dedícate cada día unas bonitas palabras. Seguro que hay muchas cosas por las que te sientes bien, y si no son muchas, al menos seguro que hay una. Cuida cada una de las palabras con las que te “etiquetas” y dite cosas nuevas para, en consecuencia, sentir nuevas emociones. Esta es una propuesta para revisar día a día, con empeño y perseverancia (ya que los viejos patrones vienen a vernos en el momento menos pensado). Conseguirás alimentarte de buenos pensamientos y por lo tanto sentirás más fuerza, confianza y esperanza.

Desde este punto podemos empezar el cambio de hábitos alimentarios. Desde la confianza, la paciencia, el perdón y la aceptación.

Os dejo con esta propuesta y en otro artículo abordaremos los auto sabotajes y nuevas estrategias para enfrentarse a ellos.

POSTED BY Estrella Alba Troya | Abr, 04, 2018 |
  • Ana

    Gracias por tu artículo! Interesante y clarificador punto de partida para ser conscientes del poder que damos a ese “lobo” tan machacador que llevamos dentro!

  • Magda Mesquida

    MOLT ENCORATJADOR. Aquesta setmana intentaré posar en práctica el vostres consells per estimar-me cada dia més.

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